El equipo de la Universidad de Zaragoza, formado por Elisa Esteban, Sandra Romero y Chabier Gimeno, ha continuado desarrollando los objetivos del proyecto ParticipaBarrio para el distrito de Las Fuentes, en la capital aragonesa. Las tres fases previstas implican una primera etapa de capacitación territorial, desarrollada este año; otra, todavía en marcha, de localización y análisis de los micropúblicos, donde surgen oportunidades para la convivialidad; y una fase final de acompañamiento en la acción comunitaria, que acaba de comenzar.
Capacitar al territorio
La capacitación territorial tuvo su momento clave en las Primeras Jornadas de Acción Comunitaria, celebradas el 25 abril en el Centro Cívico Salvador Allende, y organizadas junto a la Fundación El Tranvía. Planteadas como una actividad de transferencia del conocimiento desde este Proyecto, el objetivo era situar la búsqueda colectiva de soluciones compartidas a las necesidades del barrio en el imaginario profesional y ciudadano del territorio. En este sentido, desde el equipo universitario entendemos que las claves para comprender los cambios sociales en Las Fuentes son dos: por una parte, los cambios sociodemográficos y, por otra parte, los efectos del abandono de las políticas públicas de vivienda, con la aparición de una periferia interior, en el norte del barrio.
Con más de 170 inscripciones y el apoyo económico del Ayuntamiento de Zaragoza (Servicios Sociales Especializados), la jornada reunió a profesionales, residentes, investigadoras y estudiantes.
En primer lugar, ubicamos este barrio multicultural de clases populares en el contexto de nuestro entorno geográfico, donde esta tipología de territorios tiene características y dinámicas comunes. El profesor Juan Iglesias, de la Universidad Pontificia de Comillas (Madrid), presentó el estudio «Lo que esconde el sosiego. Prejuicio étnico y relaciones de convivencia entre nativos e inmigrantes en barrios populares» como coordinador de esta investigación para Cáritas-FOESSA. Este informe, disponible aquí, es clave para comprender cómo los cambios demográficos (envejecimiento y diversificación étnica) y económicos (precarización) en la población de estos barrios comienzan a tener efectos en las relaciones vecinales (activación del prejuicio étnico grupal).
Por la tarde, la jornada contó con profesionales del proyecto Logroño Comunitario y de Cruz Roja Huesca, así como profesorado de la Universidad Pública de Navarra, que presentaron sus experiencias de trabajo comunitario. Por último, se presentaron dos experiencias de la ciudad de Zaragoza, con la cooperativa La Bezindalla, especializada en acción comunitaria, y la iniciativa Salud en Red, esta última trabajando en el propio barrio de Las Fuentes.
Además, alumnado de la asignatura Trabajo Social Comunitario, de la Universidad de Zaragoza, presentó sus experiencias de colaboración con entidades el barrio. Entre otras, la celebración del día del Pueblo Gitano en los dos Institutos de Educación Secundaria, actividades para familias en los Centros de Educación Infantil y Primaria, un mapeo emocional del barrio, el nuevo espacio de diálogo interreligioso, entrevistas a mujeres sobre su mirada al barrio y a comerciantes migradas.
Buscando la convivialidad
La segunda etapa del proyecto, todavía en curso, consiste en la búsqueda, localización y análisis de los espacios en los que tiene lugar la convivialidad. Esto es, estamos observando lugares compartidos por personas de diferentes orígenes, sexos y edades, a los que denominamos “micropúblicos”, como comercios, escuelas, institutos, centros juveniles, clubes deportivos, centros sanitarios, etc. En estos espacios las personas que residen o trabajan en el barrio negocian diariamente cómo interactuar en un contexto de alta diversidad cultural, religiosa, étnica y lingüística. Lo hacen, como dice el sociólogo afrobritánico Paul Gilroy, “con generosidad y honestidad”, intentando “gestionar los conflictos que inevitablemente surgen entre ellas, promoviendo una mejor comunicación […] y formas más ricas de reciprocidad”
En esta labor contamos con las aportaciones del alumnado del Grado de Trabajo Social, en las asignaturas Practicum de Investigación y Trabajo Social Comunitario. Estas y estos estudiantes han observado espacios urbanos y micropúblicos durante varios meses, presentando sus resultados en la Fundación El Tranvía, ante profesionales y residentes. Durante los próximos meses, la observación continuará para detectar factores todavía pendientes de conocer, especialmente en la periferia interior del norte del barrio.
Acompañar con enfoque comunitario
Por último, en la última fase del proyecto, que se extenderá durante 2025, desde el equipo universitario colaboramos con entidades del barrio en acciones a las que aportamos el enfoque comunitario, poniendo en relación recursos y personas, con el fin de sumar energías y miradas.
Entre las acciones desarrolladas o en curso, hemos participado en dos formaciones. Una con profesionales de la Fundación El Tranvía, presentando los conceptos básicos de la Acción Comunitaria, y otra para el curso de agentes comunitarios promovido por la coordinadora Salud en Red – Las Fuentes.
Continuando la colaboración con la Asociación de Promoción Gitana (APG) y los dos Institutos de Educación Secundaria, iniciada el curso pasado, las direcciones de ambos centros educativos han dado el visto bueno al proyecto presentado por el equipo universitario y APG para promover el éxito escolar del alumnado gitano. El proyecto incluye la participación de referentes de esta asociación, así como de profesorado que, voluntariamente, se sume al trabajo grupal con el alumnado durante todo el curso.
Como fruto de esa colaboración previa con ambos centros educativos, un grupo de estudiantes del Grado de Trabajo Social están elaborando una propuesta de mentoría para el alumnado de educación secundaria del barrio. Para ello, están en contacto con proyectos similares en Cataluña y Navarra.
Y, en cuanto a la colaboración con la Fundación El Tranvía, actualmente se centra en el diseño de estrategias compartidas para conocer mejor la situación en el norte de Las Fuentes, por un lado, y en la estabilización del grupo de diálogo interreligioso, por otro lado.
