Els Orriols (Valencia)

Provincia

Valencia

Investigadores/as vinculados/as
Mapa: 

Els Orriols

Els Orriols (conocido como Orriols) es un antiguo pueblo anexionado a Valencia en 1882 que tiene poco más de 16.000 habitantes. Una parte se conoce como “Barona” desde finales de los años sesenta, en alusión al apellido del promotor de los bloques de vivienda obrera ubicados allí y en los que se instaló población inmigrada de otros lugares de España. Existe también una zona conocida como barrio Don Bosco, de “casas baratas” construidas en 1928 por promoción de socios del centro de antiguos alumnos del cercano colegio de Salesianos. En el barrio hay cuatro varios centros educativos públicos y concertados, una escuela infantil municipal, un centro de juventud y una biblioteca municipal y centro cultural se encuentran en una zona de alquerías. Cerca de allí está también la Universidad popular. El barrio acoge la biblioteca valenciana en el histórico monasterio de San Miguel de los Reyes, aunque se halla en una zona que queda separada del conjunto por la ronda norte, lo que contribuye a que socialmente se desconozca que forma parte de él. En cuanto a espacios públicos, hay un parque desde el año 2000, encuadrado en un barrio vecino (Sant Llorenç), al lado del estadio del Levante UD, en “Nuevo Orriols” y de un centro comercial (Arena). Desde el año 2018 el barrio cuenta con un parque abierto (“rincón de la ermita”) en los aledaños de una antigua ermita y del antiguo pueblo.

Leer más

Els Orriols está ligado hoy día a una cuádruple condición: 1) de clase popular; 2) periférico y vulnerabilizado; 3) Socialmente movilizado; y 4) étnica y culturalmente diverso. En cuanto a lo primero, es uno de los barrios más densamente poblados de la ciudad (418,4 hab/km2). Según el censo de 2011, la tasa de actividad era del 55,4% (58,2% en València). El registro de personas desocupadas en las oficinas de empleo de la ciudad, para 2021 en el distrito de Rascanya (que incluye el barrio), indicaba un 22,8% de paro, por encima del 18,7% de toda la ciudad. La renta media por hogar era en 2020 de 24.070 € (34.367 en la ciudad). El nivel de estudios es menor al del conjunto de Valencia. El 34% de los habitantes mayores de 18 años tiene estudios de bachillerato, segundo grado de FP o titulación equivalente, una cifra inferior a la media de la ciudad (53,8%). El 27% tiene formación inferior a graduado escolar, cifra que es del 16,9% en el conjunto de la ciudad. Por lo que se refiere al parque de viviendas, según datos del catastro, el 82% son bloques construidos entre 1960 y 1981, etapa en la que el barrio acogió un volumen importante de población llegada a la ciudad de otras zonas de España. El valor catastral por m2 es de 319,40€, por debajo del promedio de la ciudad (403,81). Los datos del sistema estatal de alquiler de vivienda apuntan a un tamaño reducido de las viviendas. La superficie es de 82 m2 en toda la ciudad y en Els Orriols es de 73 m2 y supera escasamente los 66 m2 en la zona de Barona. Según se ha planteado en trabajos anteriores, Els Orriols es un barrio con una alta incidencia de desahucios y ocupaciones. El contraste es especialmente remarcable con la zona adyacente conocida como “Nuevo Orriols” que incluye viviendas con instalaciones privadas en condominio y habitadas por población más acomodada.

En segundo lugar, por una parte, el barrio se encuentra geográficamente en la periferia norte de la ciudad, con un perfil urbanístico y una historia que lo distancian del centro de la ciudad. Por otra parte, se puede hablar de un barrio vulnerabilizado en la medida en que los indicadores de empleo, vivienda, nivel educativo e inmigración extranjera han conllevado intervenciones sociales, políticas e investigaciones que inciden en carencias que complican la vida cotidiana y los proyectos biográficos de sus habitantes debilitando, al menos aparentemente, sus capacidades. De hecho fue incluido en el atlas de vulnerabilidad urbana de España, en 2001 y se mantuvo en la edición más reciente, de 2011. Por su parte, la Oficina de Estadística estableció un nivel de renta de los barrios para el período 1981-2001 que para Els Orriols era bajo. Recientemente se ha definido un índice de áreas vulnerables de tres niveles (vulnerable, potencialmente vulnerable o no vulnerable) que aplica a cada sección censal indicadores de equipamientos, demográficos y socioeconómicos. En 2021 cuatro secciones de las catorce del barrio eran vulnerables en términos globales y cuatro más eran potencialmente vulnerables por serlo en alguno de esos tres ámbitos. Todas están ubicadas en Barona.

En general, persisten una importante dificultad de acceso y mantenimiento de vivienda y también situaciones conflictivas. Desde por lo menos 2015, pero muy visibles en redes y medios de comunicación desde la primavera de 2021 se producen en un cruce de calles dentro de Barona, menudeo de drogas y rencillas asociados a esta actividad. La asociación entre estas situaciones (y la inseguridad, en general) con la inmigración está servida por desarrollarse en una zona habitada, y por lo tanto frecuentada, por numerosa población de origen extranjero. Una asociación, además, aderezada con una invitación a la lectura miserabilista de las vidas de las y de los inmigrantes, dado el perfil sociourbano de la zona y el hecho de que el cruce en cuestión se encuentra entre una sección censal con 53% de población nacida en el extranjero, dos que concentran un 45 y una cuarta que tiene un 40%.

En tercer lugar, Els Orriols es un barrio socialmente movilizado a través de un tejido social denso y activo que ha trabajado por denunciar las desigualdades y la relegación que sienten y para reivindicar mejoras y también para subrayar la riqueza cultural del vecindario. Además, es un tejido que ha tomado parte en varias iniciativas participativas de intervención. Por ejemplo, la iniciativa “Orriols en positivo” destaca por tratar de aglutinar sinergias que ejerzan de contrapeso a la vulnerabilización del barrio mostrando vías de capacitación ciudadana. Un emblema del activismo del barrio y de sus resultados es el rincón de la ermita. Hasta 2018 era un descampado usado como aparcamiento, pero también como lugar de actividades culturales celebradas allí para reivindicar precisamente la intervención para construir el nuevo parque que tomó forma allí precisamente a raíz de un proyecto participativo impulsado por la organización Orriols Convive. Esta entidad surgió en 2014 de un proyecto europeo desarrollado por Valencia Acoge. Estas dos entidades y la de reciente creación Orriols en Lucha, el sindicat de barri o el Centro Cultural Islámico se encuentran entre las que más dinamizan un tejido asociativo diverso que incluye otras entidades como la asociación de comerciantes y la de vecinos. El acceso a la vivienda, la disposición de infraestructuras y servicios públicos, la seguridad, el racismo, la limpieza y el cierre de comercios se encuentran entre los asuntos foco de acción que recientemente han sido abordados por las entidades y por varias concejalías en diversas reuniones. A esas organizaciones con voluntad de movilización social se suman otras de intervención social, las AMPA de los centros educativos, organizaciones festivas y culturales como dos fallas y una cofradía de clavarios y entidades religiosas como son la ya citada Centro Cultural Islámico, la Asociación evangélica de Barona, una asociación sikh y una iglesia católica.

En cuarto lugar, Els Orriols es un barrio muy diverso, con presencia de hasta cuatro religiones distintas y con la mayor proporción de población nacida en el extranjero (36,2%, en 2022) entre todos los barrios de Valencia. Además el barrio tiene vecindario gitano desde hace más de cincuenta años. La diversidad se observa en la existencia de varios comercios regentados por personas de origen extranjero, en la población flotante que acude a estos y también a los templos del barrio. Otro aspecto que muestra la diversidad es la celebración periódica de una jornada intercultural que, en formato de un día o de varios días, viene organizando el tejido asociativo desde hace más de veinte años. Esta diversidad está ligada al perfil de la población del barrio, en el que no destaca la concentración de ningún colectivo nacional en particular.

Estos cuatro aspectos condicionan las expectativas de futuro del vecindario y tenerlos en cuenta es imprescindible para cualquier acercamiento que pretenda conocer e intervenir en el barrio desde la investigación y la intervención social o desde el urbanismo.

Enlaces de interés

Els Orriols

Els Orriols (conocido como Orriols) es un antiguo pueblo anexionado a Valencia en 1882 que tiene poco más de 16.000 habitantes. Una parte se conoce como “Barona” desde finales de los años sesenta, en alusión al apellido del promotor de los bloques de vivienda obrera ubicados allí y en los que se instaló población inmigrada de otros lugares de España. Existe también una zona conocida como barrio Don Bosco, de “casas baratas” construidas en 1928 por promoción de socios del centro de antiguos alumnos del cercano colegio de Salesianos. En el barrio hay cuatro varios centros educativos públicos y concertados, una escuela infantil municipal, un centro de juventud y una biblioteca municipal y centro cultural se encuentran en una zona de alquerías. Cerca de allí está también la Universidad popular. El barrio acoge la biblioteca valenciana en el histórico monasterio de San Miguel de los Reyes, aunque se halla en una zona que queda separada del conjunto por la ronda norte, lo que contribuye a que socialmente se desconozca que forma parte de él. En cuanto a espacios públicos, hay un parque desde el año 2000, encuadrado en un barrio vecino (Sant Llorenç), al lado del estadio del Levante UD, en “Nuevo Orriols” y de un centro comercial (Arena). Desde el año 2018 el barrio cuenta con un parque abierto (“rincón de la ermita”) en los aledaños de una antigua ermita y del antiguo pueblo.

Leer más

Els Orriols está ligado hoy día a una cuádruple condición: 1) de clase popular; 2) periférico y vulnerabilizado; 3) Socialmente movilizado; y 4) étnica y culturalmente diverso. En cuanto a lo primero, es uno de los barrios más densamente poblados de la ciudad (418,4 hab/km2). Según el censo de 2011, la tasa de actividad era del 55,4% (58,2% en València). El registro de personas desocupadas en las oficinas de empleo de la ciudad, para 2021 en el distrito de Rascanya (que incluye el barrio), indicaba un 22,8% de paro, por encima del 18,7% de toda la ciudad. La renta media por hogar era en 2020 de 24.070 € (34.367 en la ciudad). El nivel de estudios es menor al del conjunto de Valencia. El 34% de los habitantes mayores de 18 años tiene estudios de bachillerato, segundo grado de FP o titulación equivalente, una cifra inferior a la media de la ciudad (53,8%). El 27% tiene formación inferior a graduado escolar, cifra que es del 16,9% en el conjunto de la ciudad. Por lo que se refiere al parque de viviendas, según datos del catastro, el 82% son bloques construidos entre 1960 y 1981, etapa en la que el barrio acogió un volumen importante de población llegada a la ciudad de otras zonas de España. El valor catastral por m2 es de 319,40€, por debajo del promedio de la ciudad (403,81). Los datos del sistema estatal de alquiler de vivienda apuntan a un tamaño reducido de las viviendas. La superficie es de 82 m2 en toda la ciudad y en Els Orriols es de 73 m2 y supera escasamente los 66 m2 en la zona de Barona. Según se ha planteado en trabajos anteriores, Els Orriols es un barrio con una alta incidencia de desahucios y ocupaciones. El contraste es especialmente remarcable con la zona adyacente conocida como “Nuevo Orriols” que incluye viviendas con instalaciones privadas en condominio y habitadas por población más acomodada.

En segundo lugar, por una parte, el barrio se encuentra geográficamente en la periferia norte de la ciudad, con un perfil urbanístico y una historia que lo distancian del centro de la ciudad. Por otra parte, se puede hablar de un barrio vulnerabilizado en la medida en que los indicadores de empleo, vivienda, nivel educativo e inmigración extranjera han conllevado intervenciones sociales, políticas e investigaciones que inciden en carencias que complican la vida cotidiana y los proyectos biográficos de sus habitantes debilitando, al menos aparentemente, sus capacidades. De hecho fue incluido en el atlas de vulnerabilidad urbana de España, en 2001 y se mantuvo en la edición más reciente, de 2011. Por su parte, la Oficina de Estadística estableció un nivel de renta de los barrios para el período 1981-2001 que para Els Orriols era bajo. Recientemente se ha definido un índice de áreas vulnerables de tres niveles (vulnerable, potencialmente vulnerable o no vulnerable) que aplica a cada sección censal indicadores de equipamientos, demográficos y socioeconómicos. En 2021 cuatro secciones de las catorce del barrio eran vulnerables en términos globales y cuatro más eran potencialmente vulnerables por serlo en alguno de esos tres ámbitos. Todas están ubicadas en Barona.

En general, persisten una importante dificultad de acceso y mantenimiento de vivienda y también situaciones conflictivas. Desde por lo menos 2015, pero muy visibles en redes y medios de comunicación desde la primavera de 2021 se producen en un cruce de calles dentro de Barona, menudeo de drogas y rencillas asociados a esta actividad. La asociación entre estas situaciones (y la inseguridad, en general) con la inmigración está servida por desarrollarse en una zona habitada, y por lo tanto frecuentada, por numerosa población de origen extranjero. Una asociación, además, aderezada con una invitación a la lectura miserabilista de las vidas de las y de los inmigrantes, dado el perfil sociourbano de la zona y el hecho de que el cruce en cuestión se encuentra entre una sección censal con 53% de población nacida en el extranjero, dos que concentran un 45 y una cuarta que tiene un 40%.

En tercer lugar, Els Orriols es un barrio socialmente movilizado a través de un tejido social denso y activo que ha trabajado por denunciar las desigualdades y la relegación que sienten y para reivindicar mejoras y también para subrayar la riqueza cultural del vecindario. Además, es un tejido que ha tomado parte en varias iniciativas participativas de intervención. Por ejemplo, la iniciativa “Orriols en positivo” destaca por tratar de aglutinar sinergias que ejerzan de contrapeso a la vulnerabilización del barrio mostrando vías de capacitación ciudadana. Un emblema del activismo del barrio y de sus resultados es el rincón de la ermita. Hasta 2018 era un descampado usado como aparcamiento, pero también como lugar de actividades culturales celebradas allí para reivindicar precisamente la intervención para construir el nuevo parque que tomó forma allí precisamente a raíz de un proyecto participativo impulsado por la organización Orriols Convive. Esta entidad surgió en 2014 de un proyecto europeo desarrollado por Valencia Acoge. Estas dos entidades y la de reciente creación Orriols en Lucha, el sindicat de barri o el Centro Cultural Islámico se encuentran entre las que más dinamizan un tejido asociativo diverso que incluye otras entidades como la asociación de comerciantes y la de vecinos. El acceso a la vivienda, la disposición de infraestructuras y servicios públicos, la seguridad, el racismo, la limpieza y el cierre de comercios se encuentran entre los asuntos foco de acción que recientemente han sido abordados por las entidades y por varias concejalías en diversas reuniones. A esas organizaciones con voluntad de movilización social se suman otras de intervención social, las AMPA de los centros educativos, organizaciones festivas y culturales como dos fallas y una cofradía de clavarios y entidades religiosas como son la ya citada Centro Cultural Islámico, la Asociación evangélica de Barona, una asociación sikh y una iglesia católica.

En cuarto lugar, Els Orriols es un barrio muy diverso, con presencia de hasta cuatro religiones distintas y con la mayor proporción de población nacida en el extranjero (36,2%, en 2022) entre todos los barrios de Valencia. Además el barrio tiene vecindario gitano desde hace más de cincuenta años. La diversidad se observa en la existencia de varios comercios regentados por personas de origen extranjero, en la población flotante que acude a estos y también a los templos del barrio. Otro aspecto que muestra la diversidad es la celebración periódica de una jornada intercultural que, en formato de un día o de varios días, viene organizando el tejido asociativo desde hace más de veinte años. Esta diversidad está ligada al perfil de la población del barrio, en el que no destaca la concentración de ningún colectivo nacional en particular.

Estos cuatro aspectos condicionan las expectativas de futuro del vecindario y tenerlos en cuenta es imprescindible para cualquier acercamiento que pretenda conocer e intervenir en el barrio desde la investigación y la intervención social o desde el urbanismo.

Enlaces de interés

 

Provincia

Valencia

Investigadores vinculados
Mapa: 

Barrios / territorios relacionados